EL AIRE HUELE A TU RECUERDO
El aire huele a tu recuerdo,
tus cabellos se enredan en mis dedos;
tus ojos: mudos,
tus oídos: ciegos,
tus labios: sordos,
el cielo, lejos.
¡Qué noches tan serenas,
las que tú y yo sabemos!
En el remanso de tus aguas
sembré, un día, un limonero
que floreció entre tus manos
y en el calor que te sube
de los pechos hasta el cuello.
Las cadenas de tus ojos me sujetan
y no quiero;
déjame llorar tranquilo
porque siento que me pierdo.
Es domingo y, en la mesa,
donde te puse un florero,
hay dos vasos, una llave,
cuatro velas,
y mi corazón dormido
que antes
reposaba, a la sombra
del amor de un limonero.
1 comentario:
Wow, que hermoso poema, muy muy bueno, me encantó lo de tus ojos mudos, tus oídos ciegos, tus labios sordos... cuántas veces no recordamos de esta manera al amor ausente.
Me permití linkearte, desde ya soy tu fan !!
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